Marasevi 2007

La fotografía salió publicada en la portada del Diario de Sevilla del lunes día 12. Para los que no me conozcan, yo soy el corredor que está justamente al final de la palabra participación, a mi lado aparece José Antonio (el niño), compañero del Club Anres.

Trataré de no extenderme demasiado, aunque lo dudo. El día de la prueba a las 07:45 junto con tres compañeros de mi club, ya estábamos en los alrededores del estadio, poco antes de llegar al mismo, en concreto a la altura del Polígono Norte, observamos con curiosidad al corredor que hizo la maratón andando de espaldas. El ambiente estaba nublado y por suerte el viento era casi nulo, pero sin embargo la temperatura era alta y la humedad altísima.
Sobre las 08:15 coincidimos con varios foristas en la puerta del Hotel Isla de la Cartuja, no citaré nombres para no omitir ninguno; después de algunas fotos con los mismos, nos encaminamos al interior del estadio para dejar la ropa y prepararnos para la carrera.
Sobre las 08:45 nos adentramos en las pistas de atletismo y allí esperamos el comienzo de la carrera con los nervios ya a flor de piel. La salida fue puntual y la dio el alcalde de Sevilla. Como era de esperar debido a la gran cantidad de corredores, el primer kilómetro me salió a 6´08´´ que teniendo en cuenta lo anterior y la subidita del túnel sur, no estaba nada mal. Como ya indiqué en su momento, me apunté al trolebús de las 3h-45 minutos, como no conseguí estar cerca del resto de los apuntados, cuando salimos al exterior formamos un cuarteto con un compañero de mi club (el niño), Mamura, un amigo de CASA (Pepe) y un servidor. Desde el comienzo el globo de las 3h-30 minutos a nuestro lado y así van pasando los kilómetros y yo la verdad es que desconfiaba de ese ritmo, pero hasta la media maratón y con parada técnica incluida, conseguí lograrlo y con bastante optimismo. Poco después de la media saludé a varios familiares de corredores del club y por supuesto a mi esposa que también estaba allí; me encontraba tan bien que incluso me paré a darle un beso. Llegamos al kilómetro 25 y recojo la botella de agua de manos de Enri, además de sus ánimos. A esas alturas ya el cuarteto está dividido y los voy perdiendo de vista poco a poco. Ya en las inmediaciones del kmt. 29 el globo ya no lo divisaba y como me temía, mi ritmo va decreciendo, las piernas empiezan a quejarse, también empieza a molestarme la zona sacra y para colmo una ampolla en el dedo gordo del pie derecho.
Opto por andar un poco y hacer algunas flexiones, pero ni por esas. La cabeza empieza a decirme que me pare y me vaya para el estadio, pero como faltaban aún casi 13 Kmts. y aún cortando camino tampoco los rebajaría demasiado, hice de las tripas corazón y me mentalicé para llegar como fuese, así que andando y corriendo fui restando Kmts. En la Palmera me encontré con Ego Sum que optó por abandonar. Tuve un amago de recuperación en el 35 donde bebí un Aquarius, pero fue un espejismo, porque sobre el 37 comenzó otra vez el calvario. Pues de la forma anterior o sea andando y corriendo conseguí llegar al estadio y recibir con gran alegría los aplausos de vecinos y de mi esposa. Mi tiempo final 3h- 48´ 38´´ que teniendo en cuenta mis años y la insuficiente preparación no está nada mal. Como siempre al terminar dije que se acababa el maratón, sin embargo hoy pienso de forma distinta y ya con ganas de preparar el siguiente con más garantías. En la llegada me atendió estupendamente el amigo Pallenis.
No quiero finalizar el ladrillo sin comentar que la organización en general ha sido estupenda, con mención especial a los voluntarios, tanto en la calle como en el interior del estadio. Tengo que reconocer que en esta ocasión el IMD del Ayuntamiento de Sevilla lo ha bordado, al menos esa es mi opinión.
Saludos
Alauita