Incluiré algunas fotos del recorrido y podréis apreciar el parque en cuestión.
Recorrimos todo el parque en dirección Sur- Norte y al final otra alambrada y de nuevo coladero y a la calle, es un decir porque lo que teníamos delante era campo puro y duro adobados de chabolas y como no, perros y más perros, ante esa perspectiva, le comenté a mi compañero que lo mejor sería tomar las de Villadiego y seguir otro itinerario. Pues bien, aquí viene lo negativo de esta salida:
Estábamos en un montículo con relación a la cuneta de la SE-30 y teníamos que bajar hasta la misma, con el inconveniente de que aparte del desnivel existente, éste se componía de una especie de gravilla y piedras negruzcas. Empecé a bajar casi sentado, pero una vez que me acerqué a la parte final, me confié y seguí bajando de pie, pero en cuanto comencé la bajada de nuevo, la gravilla me hizo resbalarme y perder la verticali dad y por más que quise mantenerme, me fue imposible y terminé de bruces contra el empedrado con las consecuencias que veréis en las fotos. Con ambas rodillas sangrando y sobre todo un fortísimo dolor en la mano derecha, continuamos corriendo durante casi 5 kilómetros hasta llegar a casa.
Una vez que llegué a casa y después de ducharme y limpiarme las heridas, me fui a urgencias de la Clínica Sagrado Corazón, donde después de las pertinentes radiografías y demás, la Dra. que me atendió me dijo que no había fractura y que bastaría con un simple vendaje, no obstante al poco llegó el traumatólogo de guardia, que apreciaría algo más ya que me enyesaron la mano (la de la foto no corresponde a la misma), después lo explico.
Un par de semanas con el yeso y antiinflamatorios fue la recomendación final del traumatólogo.
Bueno pues con mi carácter inquieto y nervioso, pasé el Jueves Santo más bien regular, sobre todo al acostarme, era incapaz de dormirme y ahí exploté y le dije a mi mujer o me quitas el en yesado o lo hago yo. Yeso fuera y a dormir. Reconociendo que fue una burrada lo que hice, sin el mismo pasé Viernes, Sábado y Domingo, pero lógicamente la cosa no mejoraba, así que el Lunes me fui a la Clínica de Fátima y allí el diagnóstico fue claro y contundente:
Fractura en el 5º metacarpiano de la mano derecha. De nuevo enyesado que es el de la fotografía y a esperar una semana para ver la evolución. Poco a poco voy asimilando la situación, que remedio me queda. A trancas y barrancas puedo manejar el ordenador que habitualmente es lo que más me entretiene y hacer con bastante dificultad crucigramas que es otro de mis hobbies.
Por supuesto de correr nada de nada, de momento me pierdo la del próximo Domingo en Almensilla y ya veremos como estoy para la del Hospital del Valme y la de Nervión San Pablo.
Lo he pensado mejor y para no rellenar tanto este espacio, incluiré todas las fotos en mi album de Picasa. Las fotos a las que no he puesto nombre son mayormente del canal y del Río Guadaira
Saludos
Enlace para ver las fotos de Picasa
http://picasaweb.google.es/Alauita